Catalogados dentro del movimiento grunge, siempre estuvieron por encima de etiquetas o modas. Tal vez por ser de una ciudad en la que ese estilo empezaba a causar furor o por la insalubre obsesión de buscar una manera de etiquetar y racionalizar toda la música. El caso es que, al final se les ha recordado por ser pioneros del grunge, pero fueron mucho más.
Con un rock diferente, fusionando lo mejor del hard rock y el heavy metal, dieron un vuelco a todo lo establecido. Muestra de su gran potencial tenemos a Jesus christ pose en la que la controversia estaba presente tanto en la letra como en el vídeo que tenéis a vuestra disposición más abajo.
Dejando la sensible capacidad de cierta gente a sentirse ofendidos, hay que reconocer la valía de la canción en sí. Tanto ese track, como cualquier otro del álbum, poseen una magia especial que hace del disco uno de esos de los que nunca te arrepentirás de haber escuchado. Y que a cada nueva escucha te irá pareciendo mejor y mejor.
Una pena que pocos años después el grupo se separara, aunque hay que admitir que gracias a ello pudimos ser testigos de otro de los grandes paradigmas de la música, Audioslave de los que hablaré cuando postee, en breve, su indescriptiblemente álbum debut.
Y con todo dicho, solo me queda recomendaros encarecidamente este soberbio disco, un saludo y feliz año.
1 Rusty Cage
2 Outshined
3 Slaves & Bulldozers --> escuchar
4 Jesus Christ Pose
5 Face Pollution
6 Somewhere
7 Searching with My Good Eye Closed
8 Room a Thousand Years Wide --> escuchar
9 Mind Riot
10 Drawing Flies
11 Holy Water
12 New Damage
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