Año tras año y disco a disco han embrujado a unos y causado el desprecio absoluto de otros.
Son el caos con nombre y apellido, la revolución de los sentidos, el virtuosismo sin control aparente, pero con una magia que deja atónitos a todos los que gustan de algo más de cuatro acordes mediocres y un estribillo pegadizo y simplón.
Con su último trabajo, hasta ahora, de nombre Octahedron, vuelven a sorprendernos dejando de lado las composiciones imposibles de sus anteriores trabajos.
Y no es que no partan de un patrón concreto y desarrollen de manera llana. Más bien parece una fusión de un Zappa atiborrado de ácido y unos King crimson delirantes con heroína hasta las cejas.
Un álbum complicado de asimilar y al que hay que darle varias escuchas para apreciar los sutiles matices de los que anda sobrado. Lleno de sorpresas y de giros estilísticos que ya desde el comienzo te deja con la sensación de que se han descafeinado, pero que a lo largo de los tema te va atrapando cada vez más.
Un trabajo que hace las delicias de aquellos que no se conforman con 4 guitarreos y un par de grititos bien cogidos. Algo que, si te conformas con música de mercadillo te aburrirá, pero que si tienes una mente abierta y curiosa te dejará perplejo y agradecido de que todavía halla bandas con carácter y la capacidad de obtener un sonido único a partir de colisionar lo mejore de los últimos 30 años con el resto de cambios estilísticos que se han desarrollado hasta hoy día.
Vamos, un disco de esos que es y será visto desde los extremos más dispares, sin que pueda haber un termino medio de gente que se ponga de acuerdo. Una de esas joyas que genera desprecio y adoración a partes iguales.
1 Since We've Been Wrong
2 Teflon
3 Halo of Nembutals
4 With Twilight as My Guide
5 Cotopaxi --> escuchar
6 Desperate Graves
7 Copernicus
8 Luciforms
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